“My cat is peeing outside the litterbox” is a common concern amongst feline guardians – usually new ones. Sometimes it’s a sign of a medical issue, but the majority of the cases are completely human created. They want a cat but hate the idea of a litterbox in the home, disguising them in ways that are so outrageous, even our highly trained noses can’t find.
Felines are majestic creatures that sadly share some un-godly characteristics with every other living beings on the planet; we pee and poop and need a spot to do it in. If it’s not the litterbox, watch out ’cause anything goes! plants, couches, antique rugs, your precious boots…
Sometimes the problem gets so out of hand that the poor kitty ends up at the shelter when a simple solution would’ve solved the case: Get a litterbox. Maybe 2. It is part of the “Living with a Cat” kit.
We prefer a simple, big, not too hollow box for easy manouvering but since we are so good adapting we can learn to accept the more stylish ones with forms and colors that match your decor. The designers from hauspanther are masters at this. Just check out their ideas, maybe give them a try? I am sure you will find one that kitty will approve, solving the box dilemma once and for all; the aroma though, that is our special gift to you. Enjoy.
Do any of this sound familiar? Share with us in the comments!
EN ESPAÑOL
“Mi gato se orina fuera del arenero” es una queja común entre los nuevos humanos adoptados. El problema en ocasiones puede ser médico, requiriendo una visita al veterinario; pero la gran mayoría de las veces es causado por los mismos dueños. Quieren tener un gatito pero no soportan la idea de lidiar con una caja de arena en la casa, y la disfrazan tan bien que ni siquiera con nuestro fabuloso sentido del olfato podemos encontrarlas.
Los felinos somos criaturas majestuosas, pero compartimos características no muy divinas con el resto de los habitantes del planeta: orinamos y hacemos caca y necesitamos un lugar dónde depositarlo. Y si no tenemos arenero ¡cuidado porque todo se vale! el sofá, las plantas, esa alfombra persa, tus botas favoritas…
En casos extremos el pobre gato es llevado de vuelta al refugio cuando con un simple artículo se podía resolver el problema: Compar un arenero. Quizás 2. Es parte del equipo para “Vivir con un gato”.
Nosotros preferimos una caja grande y no muy honda para fácil manejo pero como somos excelente adaptándonos a lo que venga, también nos acostumbramos a aquéllas más estilizadas con formas y colores que armonizan con tu decoración. Los diseñadores de hauspanther.com se especializan en esto. Chequéalos y dale una oportunidad. De seguro encuentras una que tu gatito aprobará resolviendo el dilema del arenero de una vez y por todas. El aroma que dejamos en ella es nuestra maner de decir “gracias”.
¿Haz tenido estos problemas con tu minino? ¡Comparte en los comentarios!