Social media is filled with pics of cool cats enjoying the outdoors. But wait, aren’t cats supposed happier napping on your bed all day?
Remember the old days when you had to leave your cat home while you went on vacation? Those days are gone dude! More and more people are finding ways to bring their feline companion on their trips… even on the backpacking ones – whaaaaaaaa?. I for one think it’s the coolest thing since tuna-flavored catnip (patent pending). Your cat gets a serious workout while letting out his inner wild feline as she explores new frontiers. But before you pack the cat and go up the mountain, there are some precautions to take care of.
Kitty is not the type: We may look and act alike but let’s be clear, every cat is different. Your feline may be happier chillin’ at home while you travel (even if she gives you the how-dare-you! look). This kind of adventure is intense and not every pampered kitty is gonna like it.
Training is required: And it starts with the harness. Yes they are incredibly uncomfortable, seriously uncool and no cat really likes to wear it; but it’s the best way to keep her from chasing after every creature on the road. They come in all shapes and sizes so make sure you find one that fits her like a glove.
How to train her? With yummy treats! Kitty let you put it on? Give her a treat. Left it while hanging around the house to get used to it? More treats. Gets so used to it doesn’t even care? Those are some treats you’re giving her! Once she’s ok with the harness, it’s time to go for a walk around the neighborhood. And it will be less of a hike and more of a “stroll with grandma down the street” ‘cause kitty will be checking out every plant, tree, bug and squirrel. Be patient and go at her pace.
The same training goes for her backpack. There’s a style for every type of cat. You probably have to try a few before finding the perfect match.
Kitten Steps: Her first real outing shouldn’t be a weeklong hike down the canyon. You both need to get acquainted with all that new equipment and set up some sort of routine (you know how we love that): her usual food and litter, maybe her favorite blanket inside her carrier or tent – stuff that helps her relax and feel at home.
Cats adjust to the weirdest circumstances; your kitty may just feel right at home sleeping in a tent and following the trail like she’s been doing it her whole life, but the opposite can also happen. And an unhappy cat can get in trouble, even run away. Don’t stress her. If it’s not her cup of tea, again, leave her home with the sitter.
Extra everything: Congrats, your cat loves being outside. Prepare the camera ‘cause there’s gonna be cool pic moments all day long. But all that hiking means kitty is going to burn more energy than normal, so bring extra food and plenty of water. Don’t forget her vet info and First-Aid Kit.
But Gato, would you do it? Dude, my case is different. I am part feral, part culturally aware and part, well, pencil on paper. I go wherever the wind takes me and I love it! Seen so many places that I never thought other felines will check out that this trend makes me a very happy cat.
Need more encouragement? Check out Millie and Kenneth’s wonderful adventure. Then go explore and send me pics please!
EN ESPAÑOL
Vete de caminata… ¡y llévate al gato!
Las redes sociales están llenas de fotos super cool de gatos pasándola bien en lugares bien distantes. ¿Pero no y que preferían pasar el día tomando siestas en tu cama?
¿Recuerdas aquellos tiempos cuando tenías que dejar a tu gato en casa cuando te ibas de vacaciones? ¡Esos días ya pasaron dude! El número de dueños de gatos que buscan la manera de llevarlos en sus viajes va en aumento… los llevan hasta a mochilear a las montañas – whaaaaaaaa?. Personalmente pienso que es lo más cool desde que inventaron el catnip con sabor a atún (sigo esperando la patente). Tu gato se tira la sesión intense de ejercicio mientras deja salir a su felino salvaje mientras explora nuevos territorios. Pero antes de echarla en la mochila y subir la montaña, hay varias precauciones que tomar en cuenta.
Tu gato no es el indicado: Nos parecemos todos y actuamos de manera similar pero estamos claros que cada gato es diferente. El tuyo quizás se siente más feliz relajado en su ambiente hogareño mientras tú viajas (aunque te tire la mirada de me-vas-a-dejar-maldito). Estas excursiones son intensas y no aptas para gatos consentidos. Respeta su decisión.
Requiere entrenamiento: Que comienza con el arnés. Cierto, no son para nada cómodos, ni cool y no conozco a ningún gato que guste de usarlo; pero es la mejor protección que le puedes dar para evitar que salga disparado detrás de cualquier criatura que se encuentre en el camino. Vienen en variedad de tamaños, busca el que le quede perfecto.
¿Cómo lo entreno? ¡Con ricos bocaditos! ¿Se dejó poner el arnés sin pelear? Dale un bocadito. ¿Se lo dejó mientras paseaba por la casa para acostumbrarse? Más bocaditos. ¿Ya ni se queja cuando te ve traerlo? ¡Esos bocaditos son de otro mundo! Una vez acostumbrado al arnés, el momento ha llegado de salir a pasear por el vecindario. Ni pienses que va a ser un super workout, más bien es como salir con abuelita porque el minino va a querer conocer todo lo que encuentra a su paso. Se paciente con él.
El mismo tipo de entrenamiento va para la mochila donde lo piensas llevar. Hay varios estilos dependiendo del tamaño, peso y actitud del gato. Busca el que más le convenga.
A paso de gatito: Su primera excursion no debe ser esa semana en el desierto que llevas planeando. Ambos necesitan acostumbrarse a todo ese equipo y crear algún tipo de rutina (ya sabes cómo le fascina): su comida y arena de siempre, quizás su frizada favorite dentro de la mochila o en la caseta de campaña – accesorios que lo ayuden a relajarse y sentirse como en casa.
Los gatos se adaptan a las situaciones más extrañas; el tuyo quizás se siente super a gusto durmiendo en la caseta y siguiendo el sendero como si lo llevase haciendo toda su vida, pero también puede ocurrir lo contrario. Y un gato incómodo va a buscar la manera de salir del problema, esto incluye salir corriendo y perderse. No le causes estrés. Si notas que no es lo suyo, déjala en casa con la niñera.
Extra de todo: Felicitaciones, tu gato ama su vida de mochila. Pero en todas esas caminatas quema más energía que en casa por lo que va a necesitar más comida que su ración normal. Recuerda llevar comida extra, mucha agua fresca, su información veterinaria y un kit de primeros auxilios.
¿Gato, tú te tiras esa aventura? Pana, mi caso es diferente. Soy mitad salvaje, mitad conocedor de culturas y el resto… pues papel y lápiz. Voy donde me lleve el viento y ¡me fascina! Y ya no soy el único. Esta tendencia me hace muy feliz.
¡Ahora a explorar con tu gato y envíame fotos para documentarlas aquí ok!